Dice Santo Tomás que estudiar filosofía no significa estudiar lo que pensaron otros sino pensar cuál es la verdad de las cosas. Si bien a lo largo de este año nos hemos detenido a reflexionar sobre lo que grandes filósofos de la historia pensaron acerca de la realidad, esto es simplemente un peldaño del que nos servimos para pensar por nosotros mismos esos temas. Y somos como los enanos que se suben a los hombros de los gigantes para ver mejor...
En esta ocasión, y para finalizar el año, los invito a pensar y les cedo la pluma para que me lo cuenten.
La propuesta es que mediten un tema, sean capaces de argumentar para fundamentar su postura y puedan concluir viendo sus implicancias.
El espacio de deliberación interior, la posibilidad de reflexionar acerca de la realidad, es siempre un “intervalo” entre lo que recibimos y la respuesta que damos, un lugar donde valoramos críticamente lo percibido. Y es una garantía de vida plenamente personal, si no queremos que nuestro obrar se resuma en comportamientos automáticos, regidos por valores que nunca hicimos nuestros.
El pensar posibilita la libertad, y sólo si encarnamos lo que consideramos valioso podremos impregnar nuestras acciones con nuestro timbre personal. Que todo lo que hagamos tenga nuestra firma...
Consigna
Escribir un ensayo filosófico, eligiendo un tema de las Unidades 7 y 8 del cuadernillo (pág. 102 a 133).
Ante todo, ¿qué es un ensayo?
El ensayo es un tipo de composición escrita en prosa, relativamente breve, y en el cual se expone con cierta profundidad una interpretación personal sobre un tema.
Este tipo de texto se caracteriza por presentar fronteras formales imprecisas. Por un lado, se acerca al tratado y a la didáctica; y por otro, a la crítica. Sin embargo, se considera que es teóricamente más informativo y cercano a la actualidad. Muchos ensayos se publican primero como artículos en una revista o periódico y luego en forma de libro.
En general los ensayistas utilizan un lenguaje subjetivo, por medio del cual expresan sus opiniones y sentimientos con respecto al objeto de estudio.
Los temas del ensayo son muy variados. El escritor puede desarrollar ideas religiosas, filosóficas, morales, estéticas o literarias. Por eso, hay distintos tipos:
• el filosófico: desarrolla temas relacionados con la filosofía.
• el crítico: enjuicio hechos o ideas, ya sean históricos, artísticos o sociológicos. La modalidad más conocida es el ensayo de crítica literaria.
• el poético: desarrolla temas relacionados con una intención artística o estética.
El primer paso para redactar un ensayo es definir el tema. Muchas veces el área temática ya está delimitada dentro de la disciplina del ensayista. Se trata en estos casos de exponer una mirada distinta sobre temas ya estudiados por otros investigadores. Pero puede ser que el ensayista plantee un tema nuevo. En todos los casos, la elección está vinculada al interés y a las inquietudes del autor.
La estructura del ensayo
En líneas generales, el ensayo no posee una estructura rígida, y esta característica lo diferencia de aquellos textos cuya organización formal y de contenido es, precisamente, muy rigurosa, como ocurre, por ejemplo, con los artículos de las revistas de divulgación científica o la monografía. Mientras que en la monografía prevalece lo metódico, en el ensayo prevalece lo estético. En los textos científicos, la información se presenta sin ambigüedad, proyectando una sola posible interpretación, mientras que el objetivo del ensayista es problematizar el tema que analiza sin la pretensión de imponer una postura ni de ser exhaustivo.
Sin embargo, el ensayo también forma parte del pensamiento científico. Lo que sucede es que mientras para el científico lo estético es accidental, para el ensayista es esencial. El investigador busca como fin exponer los resultados de su labor, por lo que subordina lo artístico a la rigidez de la metodología, la claridad a la precisión técnica. El ensayista es, ante todo, un escritor y, como tal, busca la perfección en la expresión y manifiesta la subjetividad en sus reflexiones. Por eso aunque reúne características de ambos, el ensayo se acerca más a una obra literaria que a un tratado científico. Esta posición intermedia que hace que el ensayo esté en el límite entre lo científico y lo estético, en la búsqueda de un difícil equilibrio, es lo que le da carácter al género.
Conviene tener en cuenta que suele organizarse en introducción, desarrollo y conclusiones.
La introducción: en esta sección los autores vuelcan los datos que sirven para situar al lector con respecto a las características del ensayo, las circunstancias que motivaron su escritura y los objetivos que persiguen. Entonces, se explicita el tema elegido así como también la bibliografía que se usa como base del análisis. Esta sección es el primer elemento organizador de los contenidos y en ella también se establece el alcance que tendrá el trabajo y se definen los conceptos que serán relevantes para el desarrollo del ensayo.
El desarrollo: También denominado “cuerpo del trabajo”, el desarrollo contiene el análisis y la consideración de las ideas que se desean transmitir, lo cual se expone una vez desplegados todos los aspectos introductorios. En esta sección se encuentra el trabajo personal del autor y se caracteriza por:
-lenguaje subjetivo, el autor expresa sus opiniones y sentimientos con respecto al tema tratado.
-originalidad: ninguna de las ideas desarrolladas en el cuerpo del trabajo han sido dichas antes, se plantean nuevas ideas, una nueva visión sobre el tema.
-discurso argumentativo: el autor propone una idea central que guiará el resto del trabajo. Incorpora distintos argumentos que le permitirán sacar conclusiones que probarán la validez de su planteo inicial.
Las conclusiones: al final del ensayo, después de haber desarrollado las ideas que constituyen la sección expositiva, se escriben las conclusiones. El autor trata de destacar los aspectos más importantes del trabajo y que permiten obtener una apreciación global de los resultados obtenidos.
Fecha de entrega: Miércoles 29 de Septiembre
jueves, 23 de septiembre de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario